jueves, 2 de diciembre de 2010

AMANECE NUBLADO

Hoy he recordado París...
con sus finas gotas de lluvia cayendo despacio, sobre nuestros hombros ilusionados. Esas gotas que no llegan a mojar, que son como una suave brisa que imitando a una capa invisible llega sin apenas rozar nuestras camisas.
He vuelto a recordar aquellos días de octubre en los que amaneció nublado, con esa capa de niebla que lo inundaba todo y ese manto helado, que ni siquiera calaba. Por las calles de París hacia lo más alto y desde el Corazón Sagrado un manto de nubes invadía nuestros pies, cubriendo la ciudad, hermoso pero despiadado por no dejarnos ver lo qeu tanto nos había costado.
Hoy he vuelto a recordar aquel octubre pasado, que espero de corazón nunca sea olvidado.

30/11/10

2 comentarios:

  1. Eso es lo que nos quedará siempre y no nos lo puede quitar nadie, los recuerdos y si son agradables mejor,besitos

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  2. No estuve nunca en París pero he sentido esa sensación de gotitas de lluvia fina y el entorno gris y humedo, por lo bien que lo describes. Siempre hay algo que nos hace revivir momentos inolvidables.
    Un beso fuerte.

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